Emilio Doncel, presidente de la Confederación de Organizaciones Empresariales de la Provincia de Badajoz, asistió ayer al III Encuentro Empresarial CEOE CEPYME celebrado en Madrid, que contó con la intervención, entre otras, del presidente de Indra, Fernando Abril-Martorell, que destacó la necesidad de la innovación, el cambio de cultura y la tecnología para conseguir una transformación digital de la economía española estable, competitiva y duradera.
Abril-Martorell se refirió a ideas esenciales para que las empresas aborden la transformación digital. Entre estas, señaló el liderazgo del CEO; la asignación de responsables digitales con capacidad de actuar en los nuevos campos; trabajar con presupuestos cerrados; o crear un entorno cultural que permita contratar perfiles poco convencionales y con voluntad de transformar y que tengan visión clara de los mercados externos. Aconsejó valorar a fondo las especificidades de cada sector, y poner en marcha iniciativas en prueba y actuar con agilidad y flexibilidad para reducir el riesgo.
Terminó diciendo que la transformación digital debe abordarse cuanto antes por los que no la hayan hecho y aquellas empresas que ya la tengan en marcha han de seguir impulsándola.
Por su parte, el presidente de CEOE, Juan Rosell, subrayó que aunque España está creciendo en PIB y creación de empleo con datos que quisieran para sí la mayoría de los países europeos, sigue haciendo falta cambios y reformas imprescindibles de las que curan aunque duelan.
Puso como ejemplo a países como Italia que está abordando, desde hace tiempo, reformas; Francia, que se ha dado cuenta de su necesidad ante un excesivo estatismo o Alemania, que gracias a hacer reformas importantes, ha mantenido empleo. Las reformas, dijo Rosell, convierten en más atractivos a los países y permiten a las empresas desarrollar su actividad.
Clausuró el encuentro el presidente de CEPYME, Antonio Garamendi, que recordó las intervenciones de Francisco González, presidente de BBVA, en el primer Encuentro Empresarial CEOE CEPYME y la del presidente de Enagás, Antonio Llardén, en el segundo.
