A pesar de la difícil coyuntura política que en el pasado ha tenido que atravesar el Reino de Kuwait, en la actualidad el país se alza como un mercado de gran interés para las empresas españolas del sector de las infraestructuras, las obras civiles y la construcción. Su superávit presupuestario, fruto de su producción petrolífera, ha permitido que el Estado desarrolle desde 2010 un Plan de Inversión Pública en Infraestructuras a cinco años valorado en 100.000 millones de dólares y con el que, tan sólo durante este año, el país invertirá 22.000 millones en la construcción de 70.000 viviendas.
Kuwait necesita acometer importantes proyectos de desarrollo y, gracias a los elevados ingresos que obtiene del petróleo, el presupuesto estatal para el periodo 2012-2013 está valorado en 79.000 millones de dólares, un 12% más que el aprobado para el pasado ejercicio. Según comenta Pablo Cascón, Agregado Comercial de la Oficina Económica y Comercial de España en Kuwait, en el marco de los seminarios organizados por el ICEX en las ciudades de Barcelona, Madrid y Sevilla sobre Oportunidades de negocio en el sector de infraestructuras y construcción en Kuwait, “aunque de entrada parece que es un mercado poco atractivo para las empresas españolas, el país es importador de todo tipo de productos, salvo el petróleo y sus derivados, y la producción local de cualquier bien o servicio es prácticamente inexistente por lo que se tiene que recurrir a las importaciones para hacer frente a la demanda de la población”.
La construcción, un sector en auge
El sector de la construcción kuwaití aún refleja un pequeño porcentaje de las inversiones totales del Estado y, aún así, según Pablo Cascón “desde el pasado año está viviendo un vertiginoso crecimiento y se ha reactivado los planes a desarrollar”. Dominado principalmente por la contratación pública, el país del Golfo ha desarrollado ambiciosos proyectos entre los que se incluye la construcción y rehabilitación de hospitales; la edificación de un puente de 37 kilómetros sobre la bahía de Kuwait; el desarrollo de nueva zona industrial, portuaria y residencial en Boubiyan; el diseño de nuevas refinerías, desaladoras y centrales de ciclo combinado; mejoras en la red de carreteras; y los proyecto de Metro de Kuwait, las líneas de conexión ferroviaria con otros países del Golfo y el nuevo aeropuerto de la capital.
La puesta en marcha del Plan de Inversión Públicas en Infraestructuras ha generado en Kuwait una fuerte demanda de empresas de servicios de ingeniería civil y dirección de proyectos. Según la Oficina Comercial de la Embajada de España en Kuwait, el comercio bilateral entre España y el país del Golfo muestra una tendencia de crecimiento de las partidas de valor añadido como servicios de ingeniería y consultoría, y cada vez son más las empresas españolas que miran a hacia este mercado como una oportunidad de crecer significativamente fuera de nuestras fronteras.
“La marca España se está extendiendo por el territorio kuwaití y en algunos sectores es un activo a tener en cuenta” comenta Pablo Cascón. Las exportaciones españolas han crecido paulatinamente en los últimos años y el sector servicios en particular está comenzando a posicionarse entre sus competidores, en especial en el caso de las empresas de consultoría e ingeniería, que cada vez gozan de mayor prestigio gracias a la relación calidad/precio.
Con 3,6 millones de habitantes y una superficie de 17.818 kilómetros cuadrados, Kuwait puede parecer en principio un mercado poco interesante para el desarrollo de las infraestructuras de transportes, ya que en apariencia, las principales necesidades ya están cubiertas. Sin embargo, el Gobierno ha puesto en marcha un ambicioso plan que cubre desde la creación y mejora de carreteras, la construcción de puentes o el desarrollo ferroviario y aéreo, con el fin de mejorar los servicios de Kuwait.
En la actualidad la red de carreteras cubre unos 5.000 kilómetros y a través del multimillonario programa del gobierno se invertirán 14.000 millones de dólares en el desarrollo de las carreteras de Jhara –actualmente en ejecución-, Abdull Nasser –cuya obra se está desarrollando por un consorcio italiano español en el que se está subcontratando numerosos servicios-, o la a autopista que conecte el puerto de Shuwaikh con Shubiya y la construcción de varios puentes y pasos elevados. Además el sector ferroviario cuenta en estos momentos con un proyecto para servicio de metro de 171 kilómetros, valorado en 7.000 millones de dólares y que podría ser licitado durante este año.
Uno de los proyectos más ambiciosos del país es la creación de Silk City, ubicado al norte de la región y en el que se invertirán 86.000 millones de dólares para la edificación de esta nueva ciudad financiera y zona residencial – que albergará a 100.000 habitantes-. Además este proyecto incluirá una zona industrial y un nuevo puerto, prioritarios para la estrategia estatal de convertir el norte del país en una puerta de acceso a Irak. También en este ámbito geográfico se encuentra la isla de Failaka en la que se han establecido una serie de programas ligados al desarrollo turístico, con la construcción de numerosos resorts, o la isla de Boybiyan en la que se invertirán 6.600 millones de dólares en el desarrollo de zonas residenciales.
Las empresas españolas tienen un abanico de posibilidades en proyectos relacionados con el petróleo y el gas, las infraestructuras de transportes, las manufacturas industriales y bienes de equipo relacionados con los sectores energéticos, construcción y manipulación de fluidos. Además, tras los últimos estudios realizados como consecuencia de los yacimientos de gas que se han encontrado en el país, el Estado necesita desarrollar y modernizar su industria por lo que necesitará el apoyo del sector privado extranjero para poder hacer frente a la producción. España se encuentra en una posición ventajosa a la que sacarle el máximo partido posible y el Estado kuwaití, según Pablo Cascón “está trabajando para que el sector privado penetre en el país con una presencia mucho más fuerte”. El país del Golfo conoce muy bien nuestra competitividad empresarial en materia de ciclos combinados, por lo que las puertas están abiertas para que nuestras firmas penetren en el territorio kuwaití.
Por último pero no menos importante, Kuwait es conocido como una tierra de desiertos y es el único país del mundo sin lagos o reservas de agua naturales, por lo que la puesta en marcha de nuevas desalinizadoras están entre los objetivos prioritarios del Ministerio de Obras Públicas. Además, hasta el 21 de junio se encuentra abierto el proceso de adjudicación del proyecto UM Al Haymam, que tratará 500.000 metros cúbicos de agua diario.
Fuente: ICEX