El presidente de CEOE, Juan Rosell, ha abogado por una educación en clave empresarial porque “solo con más y mejores empresas se creará empleo” y no por decreto ley, durante su intervención en el acto de inauguración del XI Encuentro Empresarial Iberoamericano que se ha celebradoen Cartagena de Indias, bajo el lema de Juventud, Educación y Emprendimiento y en el marco de la XXV Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno que tiene lugar también en esta localidad colombiana.
Según Juan Rosell, es necesario aprender y educar en clave empresarial y hay que hablar en la Escuela, la Universidad, e incluso, las guarderías, de las empresas. Normalmente no se habla de ello y si se habla es mal, sin que nadie diga lo que es en realidad. Y se debe lograr el convencimiento de la sociedad para que entienda la educación como la gran clave estratégica y social. Señaló que la pobreza se combate con más y mejor educación y, en definitiva, con más y mejores empresas
En este sentido, indicó que se deben aprovechar las nuevas tecnologías y la digitalización para enseñar más y a un coste razonable, con el que se pueda invertir y que se debería empezar ya, teniendo en cuenta no solo a los jóvenes sino también a los mayores. Así, subrayó que hay que formar teniendo en cuenta el futuro. Para ello, señaló que se debe formar a los docentes, evaluar gastos y responsabilizar a las familias y a los alumnos, recordándoles que además de derechos, existen responsabilidades y obligaciones.
Conclusiones
En sus conclusiones los presidentes destacaron los siguientes asuntos de importancia:
-Los jóvenes de Iberoamérica son el presente y el futuro de nuestras sociedades. Son símbolo de progreso e innovación. Algo más del 30% de la población de Iberoamérica se encuentra en el rango de 15-29 años de edad (108 millones), sobre un total de más de 1.800 millones de jóvenes en todo el mundo.
La Región está en un momento clave para posicionar a los jóvenes como actores estratégicos para la trasformación social, económica, política y cultural. Esta realidad demográfica es una ventana de oportunidades para los países de Iberoamérica, o sea, hay una parte significativa de la población con capacidad para trabajar, producir, ahorrar e invertir. Pero, también, es un desafío, toda vez que las economías requerirán en el futuro de personas capacitadas para afrontar las transformaciones que les permitan dar el salto definitivo al desarrollo.
La juventud debe ser un eje central en las en las instituciones y en las políticas públicas integradas e integrales de Iberoamérica que fomenten en particular la educación, el emprendimiento y la inversión.
-La educación es un eje clave del desarrollo. Con más educación es posible mejorar las condiciones sociales, económicas y culturales de los países. El aumento de la cobertura, los niveles, y la calidad educativa de la población se asocian al mejoramiento de otros factores claves de desarrollo y bienestar, como la productividad, la competitividad, la movilidad social, la reducción de la pobreza, la construcción de la ciudadanía y la identidad social y, en definitiva, el fortalecimiento de la cohesión social. La educación, sea pública o privada, así como la formación profesional, los aprendizajes y las prácticas profesionales dentro de las empresas, juegan un papel esencial para permitir a los jóvenes ingresar al mercado de trabajo y desarrollarse en la vida adulta. 10. La promoción de la iniciativa empresarial y del empleo independiente de los jóvenes es fundamental para que los jóvenes no solo salgan de la escuela a buscar trabajo, sino también a crearlo. El emprendimiento es precisamente una de las variables clave para el crecimiento económico y debería reafirmarse el valor social de dicha condición. La ausencia de competencias específicas, la dificultad de acceso a la financiación y a los mercados, la compleja y onerosa regulación pueden llevar a que los emprendimientos de jóvenes no se concreten o deriven en empleos informales.
Los presidentes de las organizaciones empresariales iberoamericanas consideran que es fundamental promover políticas que fomenten el desarrollo de la economía digital y la provisión de servicios de conectividad; las condiciones para constituir y desarrollar empresas, incluidas las pequeñas y medianas empresas: fomentar el aprendizaje, creación y acceso a redes, participación en las cadenas de valor de las empresas, crear puntos de atención al emprendedor, aligerar los costos, acortar los procedimientos previos al inicio de la actividad empresarial, simplificar los procesos de protección del conocimiento y también favorecer una gran variedad de formas de empleo e incentivos de distintos tipos para que las nuevas empresas puedan emplear la mayor cantidad de jóvenes.