El Ejecutivo comunitario estima que las actividades fraudulentas en materia de IVA transfronterizo restan 50.000 millones de euros de recaudación al año en la Unión Europea. Bruselas confía en que las nuevas normas, que deben ser acordadas por los Veintiocho, reduzcan esta cifra en un 80%.
El objetivo de Bruselas es que los países del club europeo alcancen un acuerdo sobre esta propuesta a lo largo de la legislatura actual, que finaliza en la segunda mitad de 2019, y espera que entre en vigor en 2022.
El elemento principal de la reforma es la eliminación de la norma que exime del pago del IVA en las transacciones de bienes y servicios entre empresas de distintos países del bloque comunitario. En estas operaciones se aplicará además el principio de destino.
De esta forma, cuando una empresa venda bienes o servicios a otra compañía con sede en otro país de la UE, la operación se gravará con el tipo de IVA del Estado miembro al que pertenezca la empresa compradora.
Así, el impuesto será recaudado por las autoridades fiscales del país de origen y posteriormente se transferirán al Estado miembro de destino. La Comisión Europea es consciente de la complejidad de este cambio, por lo que plantea que en una primera fase las modificaciones únicamente se apliquen al comercio de bienes.
Para facilitar la trasferencia de la recaudación del IVA entre Estados miembros, las empresas podrán utilizar un portal ‘online’ que está disponible en su idioma y de acuerdo con las normas y las plantillas de su país. Bruselas cree que la modernización y simplificación del IVA puede reducir en 1.000 millones los costes a los que se enfrentan las empresas que operan entre países.
COMBATIR EL FRAUDE DEL IVA
El Ejecutivo comunitario ha remarcado que la situación actual que exime del pago del IVA en operaciones transfronterizas hace que el fraude sea “muy fácil”. En particular, ha señalado que la reforma busca atacar el llamado ‘fraude de carrusel’.
Esta práctica es aquella que realizan empresas que compran mercancía de forma transfronteriza sin tener que pagar el IVA de la misma y revenden posteriormente estos bienes cargando este impuesto. Estas empresas cobran la venta y muchas veces desaparecen sin haber pagado el IVA a las autoridades fiscales de ese país.
La Comisión Europea ha destacado que esta reforma es uno de sus compromisos más antiguos en materia fiscal y ha subrayado que creará “un nuevo y definitivo sistema de IVA para la Unión Europea”.
“No podemos seguir viendo cómo estos miles de millones desaparecen. Es el momento de arreglar el sistema para hacerlo más simple, más sólido y, por encima de todo, más resistente frente al fraude. El principio básico de esta reforma es crear una zona única de IVA, al nivel del mercado único”, ha destacado el comisario de Asuntos Económicos y Monetarios, Pierre Moscovici.
El Ejecutivo comunitario ha avanzado además que presentará a lo largo de noviembre otras tres propuestas relacionadas con el régimen del IVA en el bloque comunitario, que son la modificación de las normas sobre tipos reducidos, el refuerzo de la cooperación administrativa entre Estados miembros y la simplificación del IVA para las pymes.
