El secretario general de la Confederación Regional Empresarial Extremeña, Fco. Javier Peinado, ha valorado de “positivo para la sociedad en su conjunto” la aprobación de los Presupuestos Generales de la Comunidad Autónoma de Extremadura para 2019, ya que “la prórroga de los del ejercicio anterior, siempre genera más carga administrativa y dificulta la acción de gobierno”, aunque “estos presupuestos no sean al 100 por cien de nuestro agrado”.
En este sentido la patronal extremeña ha señalado que “no son ni nuestros presupuestos ni son los mejores presupuestos que se podían haber sacado para la Comunidad” por aquello de que “no se hace el esfuerzo que se debiera en inversiones productivas”, sin menoscabo de que “somos consecuentes y realistas con las dificultades que tienen las cuentas públicas por el nivel de endeudamiento que tenemos y por el cumplimiento del objetivo de déficit impuesto por Bruselas y por el Estado Español”.
No obstante, y sin querer entrar a cuestionar las partidas de gasto social, que mayormente ocupan gran parte del presupuesto, la CREEX entiende que en algunas de ellas “sí habría que hacer un esfuerzo por ajustarlas”, sobre todo “intentar reducir aún más el gasto estructural y corriente que sigue manteniendo la comunidad autónoma”, para que esos recursos puedan ser destinados a “mejorar las inversiones que realmente dinamicen y creen un escenario adecuado para generar actividad productiva y económica, o lo que es lo mismo, actividad empresarial del sector privado”, que realmente “es la única manera que entendemos puede generar empleo en esta comunidad autónoma” que es nuestro principal problema, señala Peinado.
En cuanto a las políticas sociales, la Confederación Regional Empresarial Extremeña no entra a cuestionar las políticas de sanidad, dependencia y educación pero “sí creemos que es un gasto que es necesario revisar, sobre todo el destinado a ayudas y subsidios como el de la renta básica”, que según el secretario general de la patronal es “pan para hoy y hambre para mañana”. La CREEX no puede afirmar que haya un abuso en ese sentido por parte de la ciudadanía, pero sí considera que “está alterando el mercado laboral”, ya que cada vez es más difícil cubrir algunos puestos de trabajo, “además de fomentar la economía sumergida”.