Aliviar la presión fiscal a las empresas y plantear al gobierno central un trato diferenciado para Extremadura como territorio en riesgo de despoblación son dos de los retos que la Confederación Regional Empresarial Extremeña (CREEX) ha planteado al gobierno autonómico que salga de las urnas el próximo 26 de mayo.
Dentro del documento ’13 retos & 100 soluciones para las empresas extremeñas’, la organización empresarial más representativa del tejido productivo de la región plantea, como primer desafío ‘Reducir la presión fiscal a micropymes y autónomos’. Según se señala, los distintos tributos, tasas y cuotas sociales que ha de soportar una empresa en Extremadura suponen nada menos que el 49,57% del resultado bruto de explotación, un pesado lastre que dificulta la capitalización de estas empresas y por tanto su capacidad para invertir, innovar, crecer y crear empleo.
Frente a esto se propone:
- Bonificaciones de cuotas en impuestos cedidos para micropymes y autónomos
- Reducir el impuesto de sociedades para empresas con cifra de negocio inferior a un millón de euros
- Aliviar la presión fiscal municipal y frenar nuevos tributos autonómicos
- Rebajar las cuotas sociales para pymes y autónomos
- Reducir el tipo mínimo de IRPF en el tramo cedido e incrementar las deducciones personales y familiares
- Bonificar la inversión en I+D+i de las micropymes
- Crear bonificaciones específicas para el comercio minorista de proximidad
Además, como segundo reto, CREEX ha propuesto ‘Una fiscalidad diferenciada para una Extremadura más competitiva’. Aquí el planteamiento es presionar al gobierno central para que Extremadura tenga un régimen fiscal diferenciado que permita la creación de nuevas empresas y la consolidación de las ya instaladas.
Según la organización empresarial más representativa de Extremadura, este régimen especial es perfectamente viable y no chocaría con la normativa de la UE “puesto que la propia Unión Europea propone, para luchar contra la despoblación, establecer un tratamiento fiscal diferenciado a territorios que, como Extremadura, están sufriendo este problema”, ha comentado el secretario general de CREEX, Javier Peinado.
Se trataría, pues, de aprovechar esta baza al máximo, con una presión fiscal menor mientras Extremadura presente indicadores de desarrollo peores que la media, y además favorecer la consolidación de nuevas empresas con reducciones en las cuotas sociales y en el tipo del impuesto de sociedades durante los primeros años de vida.
Puede acceder a los vídeos explicativos de estas medidas en los siguientes enlaces: