El Banco de España concederá más tiempo a los proveedores de servicios de pago para que se adapten a los requerimientos de la nueva normativa PSD2 para pagos electrónicos, que entra en vigor el 14 de septiembre, y que, entre otras cosas, exige a los usuarios una doble autenticación de su identidad.
Uno de los objetivos del Reglamento Delegado (UE) 2018/389 es "mejorar la seguridad de los pagos y reducir el fraude en el proceso de autenticación", recuerda el Banco de España en una nota remitida este miércoles.
Aunque todos los proveedores de servicios de pago deberían cumplir con los nuevos requisitos antes del 14 de septiembre, la Autoridad Bancaria Europea (EBA) reconoce la complejidad de los mercados de pagos y la necesidad de hacer cambios que permitan a los emisores aplicar esa autenticación reforzada. En particular, añade la nota, aquellos que afectan a actores involucrados que no tienen la condición de proveedores de servicios de pago (PSPs), como los comercios electrónicos.
Por eso, la EBA acepta que "de manera excepcional" las autoridades nacionales competentes puedan trabajar con los PSPs y otras partes interesadas, incluyendo consumidores y comercios, para conceder un tiempo adicional "limitado" que permita a los emisores de instrumentos de pago y a los adquirentes de operaciones migrar hacia soluciones que cumplan con los requisitos de autenticación.
Esta flexibilidad supervisora -cuya extensión no se menciona en ningún momento- se condiciona a que los proveedores de servicios de pago acuerden con sus respectivas autoridades nacionales competentes los correspondientes planes de migración y los ejecuten "de forma urgente".
El Banco de España, en el marco de esa flexibilidad, está trabajando con las autoridades europeas para asegurar "el debido cumplimiento de la Directiva", añade la entidad, que revisará los planes de migración que presenten los proveedores de servicios de pago.