La Confederación Regional Empresarial Extremeña (CREEX) ha mostrado su apoyo a la Plataforma Ciudadana N-430 que reivindica la conversión de esta carretera en autovía. El secretario general de la CREEX, Javier Peinado, y el presidente de la Cámara de Comercio e Industria de Badajoz, Mariano García Sardiña, mantuvieron ayer una reunión con los representantes del colectivo que exige la puesta en marcha de manera inmediata de las obras de desdoblamiento de la actual N-430, en el transcurso de la cual expresaron su respaldo total a la exigencia.
“No entendemos la demora acumulada por los distintos gobiernos (recordemos que la conversión en autovía se anunció hace más de dos décadas), cuando se trata de una infraestructura totalmente necesaria, debido al riesgo que supone ahora para las personas la actual carretera, la densidad de tráfico que soporta, en gran parte vehículos pesados de media y larga distancia, y el hecho de que debe ser la conexión que vertebra la zona de la Siberia”, ha explicado Javier Peinado.
La CREEX va a promover la constitución de un Pacto Social y Político que respalde la demanda ciudadana y que refuerce las exigencias y las acciones reivindicativa que plantea el colectivo ciudadano.
La conversión de la N-430 en autovía para conectar con la A-43 (la conocida como Autovía de Levante) es un proyecto que fue anunciado nada menos que en 1998, sin que nada se haya avanzado más que en algunos estudios previos. De hecho, la demora es tal que en 2009 se supo que había que rehacer el estudio de impacto ambiental. Desde entonces no ha habido más noticias.
La actual A-43 conecta Ciudad Real con Valencia, y para Extremadura, conectar desde Torrefresneda supondría disponer de un trazado rápido y seguro para viajeros y mercancías entre Badajoz y Valencia sin tener que pasar por Madrid. Además, supondría una mejora sustancial de la movilidad en la Siberia, que ahora presenta accesos más que complicados y donde se producen múltiples accidentes, según denuncia la Plataforma N430.
Hartos de promesas incumplidas y demoras sin explicación, medio centenar de municipios de Extremadura y Castilla-La Mancha constituyeron la actual Plataforma. Su próxima acción será una concentración el 17 de octubre en Navalvillar de Pela para cortar la carretera y hacer visible así su malestar.
La CREEX como organización empresarial más representativa del empresariado extremeño respalda como justa esta movilización y, además, pretenden ir más allá, reclamando la implicación de grupos políticos y representantes del tejido social para mostrar un frente compacto a la hora de exigir ante el Gobierno de España que se aborde desde ‘ya’ con compromisos de plazos esta obra tan necesaria.