La Confederación Regional Empresarial Extremeña (CREEX) ha apuntado que las medidas anunciadas por el Ministerio de Agricultura para movilizar a personas en paro para que se incorporen a las tareas de recolección en el campo sean eficaces y claras, y den seguridad tanto a las empresas agrarias como a los trabajadores.
“Estamos en un momento crítico para sectores como el de la fruta de hueso, y si ya el año pasado hubo muchos problemas para encontrar mano de obra, este año, con las restricciones por el Estado de Alarma puede ser aún peor, mucho peor, y eso sería un auténtico desastre tanto para los agricultores, como para los temporeros, y también para toda la sociedad, porque si la fruta se queda en el árbol, ¿cómo se van a abastecer los mercados”, ha explicado Javier Peinado, secretario general de la CREEX.
Peinado ha indicado que las medidas deben ser flexibles y de aplicación inmediata, “porque la fruta no espera, y menos este año, que con las temperaturas anormalmente suaves del invierno, está madurando antes”.
La campaña de recogida de la fruta de hueso (melocotones, cerezas, nectarinas...) comienza en una semana y faltan entre 100.000 y 150.000 personas para cubrir esta recolección, según reconoció el propio ministro de Agricultura, Luis Planas, la semana pasada, y recoge El Mundo. Las organizaciones agrarias llevan semanas advirtiendo de que esta campaña puede echarse a perder si no hay gente suficiente para ejecutarla. A diferencia de otros productos agrarios, la recolección de fruta y las hortalizas no está mecanizada, son labores muy manuales, que requieren de personal.
El problema es que las personas que suelen hacer estos trabajos son inmigrantes que vienen a nuestro país a hacer estas labores y luego se van. Ahora, con las restricciones de movilidad que hay como consecuencia de la pandemia del coronavirus, no pueden entrar en España.
Según explican fuentes del sector, el paquete de medidas que se aprobará hoy busca flexibilizar la contratación de inmigrantes y se ampliará el permiso de residencia a los temporeros inmigrantes que ya están aquí.
La idea es que los parados puedan incorporarse a estas labores y hacer compatible este contrato temporal con el cobro del subsidio o prestación por desempleo. Una de las opciones que se barajaba también era movilizar a las personas afectadas por los Erte (Expediente de Regulación Temporal de Empleo). Esta era, al menos, una de las opciones que planteaban las organizaciones agrarias.
“Ya lo dijimos el año pasado y este año con más razón: no tiene sentido que en Extremadura, con más de 112.000 parados, no encuentre mano de obra para un sector que está demandando mano de obra”, ha concluido el secretario general de la CREEX.