Ante la posibilidad, con muchos visos de hacerse realidad, de que el martes el Consejo de Ministros apruebe un aplazamiento de las declaraciones trimestrales de impuestos, la Confederación Regional Empresarial Extremeña (CREEX) ha señalado que se trata de una medida positiva por dos razones. Por un lado, por aliviar, siquiera temporalmente, la tesorería de las empresas en un momento crítico, donde no hay ingresos o estos han caído notablemente. Por otro, y muy importante, al aplicarse el aplazamiento con carácter generalizado y automático, se evitaría la carga burocrática añadida que estaban sufriendo las empresas a la hora de solicitar acogerse a la medida hasta ahora vigente, que obligaba a presentar las declaraciones y una solicitud de aplazamiento a tres meses sin intereses o a seis, con interés de demora los tres últimos.
“Tener que presentar las declaraciones y un documento pidiendo el aplazamiento supone más trámites, en un momento en el que hay muchos negocios cerrados, con la dificultad que ello supone de acceso a la documentación necesaria para luego trasladársela a las gestorías y asesorías, y completar todo el proceso”, ha señalado Javier Peinado, secretario general de la CREEX, para agregar: “además, hay muchos casos en los que se ha solicitado un ERTE pero todavía no se cuenta con la aprobación. En esos supuestos, el empresario tendría que hacer las nóminas mensuales y la declaración con las retenciones a los trabajadores por todo el mes. Luego, al aprobarse, al ser con carácter retroactivo, tendría que volver a hacer los cálculos para que solo contasen los primeros quince días del mes, y una paralela para pedir la devolución de las retenciones, y también buscar la forma de compensar lo que los trabajadores hayan cobrado los quince últimos días. En fin, doble tarea con las dificultades que hay ahora para realizar cualquier trámite por las restricciones a la movilidad”.
Ahora, de aprobarse el aplazamiento automático “que esperamos que rija hasta junio”, toda esa tramitación no se realizaría, evitando sumar más carga administrativa.
PAPEL DEL PRESIDENTE DE LA JUNTA
La CREEX ha destacado el papel que la Junta de Extremadura, encabezada por su presidente Guillermo Fernández Vara, ha jugado en la decisión de activar esta nueva medida de aplazamientos, actuando como interlocutor cualificado ante el Gobierno de España a la hora de trasladar las propuestas de las mesas de diálogo social que siguen trabajando diariamente en Extremadura, con sintonía entre el Ejecutivo regional, CREEX y las organizaciones sindicales CCOO y UGT. “El diálogo social, más vivo que nunca en Extremadura, no significa que estemos de acuerdo en todo, sino que podamos hablar de todo, plantear todas las propuestas y debatirlas, y que estas vías de comunicación permanezcan siempre abiertas”, ha comentado Javier Peinado.
Desde la organización más representativa del empresariado extremeño se ha pedido que este aplazamiento sea hasta el mes de junio, “porque en mayo tampoco la situación de liquidez va a estar mucho mejor en las empresas, y la tramitación va a seguir teniendo problemas”, y suponga algo de oxígeno, aunque Peinado ha seguido insistiendo en que la medida más adecuada sería suspender estos impuestos mientras dure la crisis derivada del COVID-19.