El Secretario General de la Confederación Regional Empresarial Extremeña (CREEX), Javier Peinado, ha mostrado “preocupación y esperanza” respecto a la prórroga de los ERTE más allá del 30 de junio. “El compromiso está en la mesa del diálogo social, y el objetivo es llegar a acuerdos para que, si no de manera genérica, sí se contemplen prórrogas en función de sectores, casos, territorios y tamaños de empresa, de manera que se actúe con los mismos criterios de la desescalada del confinamiento, con fases para que las empresas puedan ir adaptándose y recuperando a los trabajadores en la medida que vaya siendo posible”.
Peinado ha señalado también que la decisión de la UE de respaldar la financiación de esta prórroga en los ERTE hasta diciembre de 2022 con 100.000 millones a cargo del fondo SURE, adoptada ayer por el Consejo Europeo, sea un elemento más para que el Ejecutivo de Pedro Sánchez disipe cualquier duda en este sentido.
“Esperemos que con todos estos elementos sobre la mesa, es decir, situación de las empresas, evolución de la actividad y respaldo de la UE, consigamos negociar un acuerdo adecuado y una prórroga coherente, adaptada a la evolución, porque mantener el tejido productivo es el mejor escudo para mantener el empleo y el Estado del Bienestar y, por desgracia, va a ser preciso en algunos sectores y empresas que los ERTE continúen, algunos hasta final de año y otros, incluso, puede que más allá”, ha indicado el dirigente de la organización más representativa del empresariado extremeño, para añadir: “en todo caso, no debemos adelantar acontecimientos, sino ir viendo con un espíritu realista y constructivo, qué es lo que se va demandando, cómo se reactiva la economía, cómo se comporta la demanda y las ventas, si regresan los clientes…, todo eso es lo que marcará el ritmo. Lo que no tendría lógica alguna es acabar con los ERTE el 30 de junio, porque eso llevaría a una situación mucho más caótica, de despidos masivos y cierres de empresas”.