Se trata de un primer decálogo de conclusiones que muestra, a modo de resumen, lo tratado de manera trasversal en las diferentes mesas de la cumbre. Incluye los siguientes temas:
1.- Visión de medio y largo plazo para llevar a cabo las inversiones necesarias para hacer de España un país más competitivo, resiliente y sostenible. La transición energética es fundamental para alcanzar esta sostenibilidad. España puede acelerar las inversiones en energías verdes, que además pueden tener un efecto arrastre en el corto plazo.
2.- La confianza a través de la seguridad jurídica es fundamental. Esa confianza es clave para generar credibilidad y atraer y retener inversiones.
3.- Consenso y diálogo social para llegar a acuerdos que nos ayuden a salir de la crisis. No se deben revertir reformas que han generado crecimiento económico y mejora del bienestar, y en todo caso se deben mejorar aquellos aspectos en los que exista margen.
4.- Un marco regulatorio más flexible y adaptado a los cambios de la economía española.
5.- Colaboración público-privada para mejorar la eficiencia y calidad en la prestación de servicios públicos tanto en el ámbito de la educación y la sanidad como en el de las infraestructuras.
6.- Conservar el tejido productivo a través de medidas que están funcionando, como los ERTE o las líneas de avales públicos, adaptándolas y acompasándolas a la evolución de la actividad económica de cada sector.
7.- Reindustrialización para generar un empleo de calidad y mejor remunerado. El objetivo debe ser alcanzar un peso del 20% sobre el PIB. Aquellos territorios que superan este porcentaje son los que también presentan menores niveles de desempleo.
8.- Innovación y digitalización del tejido productivo, sobre todo de las pequeñas y medianas empresas y de la Administración pública.
9.- Estabilidad presupuestaria. Hay que disponer del gasto público necesario en el corto plazo para salir de la crisis, y volver a una senda de estabilidad fiscal a medio y largo plazo. Para ello, hay que promover el crecimiento económico y evitar, sobre todo, subidas impositivas en momentos de crisis económica. Otros países europeos están aplicando rebajas de impuestos para salir de la crisis.
10.- Igualdad de oportunidades y el crecimiento inclusivo a través de la formación y la educación. La prioridad son las personas y el empleo, la mejor fórmula de inclusión social; también que no debemos dejar a nadie atrás en la recuperación y en las transformaciones energéticas y digitales. Por último, apuesta por revitalizar el contrato social.
Dicho todo esto, Isla ha recalcado que “tenemos que contar con más Europa”. “España tiene que apostar por Europa, que es la que nos ha proporcionado bienestar, estabilidad y progreso. Esa apuesta implica responsabilidad por nuestra parte, en términos de generación de confianza y rigor presupuestario”, ha dicho.
Desde la Confederación Regional Empresarial Extremeña (CREEX), además de valorar esta cumbre como “un ejemplo de trabajo colaborativo, de unidad de acción y de consenso”, su Secretario General, Javier Peinado, ha manifestado que el decálogo de conclusiones “reflejan una idea nítida de cómo debe ser la recuperación, basada en el diálogo, el impulso a la industria y la nueva economía, la digitalización, la igualdad de oportunidades, fundamental para territorios como Extremadura, y la seguridad jurídica, la flexibilidad laboral y el mantenimiento de medidas como los ERTE como acciones inmediatas que ayuden a las empresas a remontar el panorama de crisis y mantener el empleo”.
Peinado ha señalado también que las conclusiones contemplan acciones “a corto, medio y largo plazo, unas acciones que implican a toda la sociedad, y en las que el empresariado ya está comprometido. Por ello, esperemos que calen entre nuestros representantes políticos y las Administraciones también las asuman como propias”.