Javier Peinado, Secretario General de la Confederación Regional Empresarial Extremeña (CREEX) ha asegurado que la posibilidad de que Cristian Lay se haga con el Grupo Gallardo Balboa “es una noticia muy positiva, por una parte, por tratarse de un empresario extremeño, que además cuenta con un equipo humano solvente, con lo que el “relevo generacional” está asegurado, pero, sobre todo, porque se trata de un grupo consolidado, con gran experiencia en la gestión de diversas actividades productivas, y eso supone una garantía para que la operación tenga éxito”.
Peinado ha señalado que lo primordial para el mantenimiento de la actividad y el empleo en el Grupo Gallardo Balboa es que la gestión la asuma “un equipo solvente, un grupo empresarial avalado por su trayectoria”, por lo que desde la CREEX se ha mostrado “todo el apoyo a la operación y además hemos trasladado a la Junta de Extremadura la petición de que Extremadura Avante se implique en este asunto, como instrumento de carácter público de apoyo a la activación de proyectos empresariales en la región”.
CATELSA
Respecto a la situación de la empresa CATELSA, el Secretario General de la CREEX ha apuntado como causa clara a la situación que vive el sector de la automoción “no solo en España, sino a nivel internacional”, y la firma cacereña ha sufrido “el importante descenso de ventas de automóviles provocado por la pandemia”, a lo que se ha sumado en el caso de esta empresa “que este descenso les ha pillado en pleno cambio tecnológico por lo que supone la economía verde, el cambio de modelo hacia el fin de los combustibles fósiles, y el impacto ha sido muy duro”.
Peinado ha mostrado su esperanza en que con los ERTE la empresa pueda mantenerse a flote, “porque, aunque se destruya finalmente empleo a corto plazo, lo relevante es que la empresa siga viva, que no cierre, puesto que desde ese germen puede volver a remontar, pero si la empresa tiene que cerrar, entonces no habrá vuelta atrás”.
El dirigente de la organización más representativa del empresariado extremeño ha afirmado que CREEX se mantendrá pendiente y en disposición de ayudar en lo que se precise para que la empresa sobreviva “aunque a corto plazo, por desgracia, haya que acortar la plantilla, pero esta destrucción de empleo puede luego compensarse, siempre que se mantenga la actividad y se le preste la ayuda que ahora necesita”.